¿Dónde encontrar esos rincones aún no descubiertos de Aplao que parecerían sacados de un sueño? Porque sí, si hay algo que no falta en nuestro querido Perú son vistas que le dan envidia hasta al Instagram más recargado. Así que, agarra la cámara, el móvil, o lo que sea que uses para capturar el momento, porque vamos a recorrer Aplao en busca de los lugares más fotogénicos.

Cañón de Majes: el paisaje que nunca esperaste encontrar

Seguro que has oído hablar del Cañón del Colca. ¿Pero sabías que el Cañón de Majes, justo ahí en Aplao, puede darle una buena pelea en términos de espectacularidad? Este lugar es, literalmente, una mina de oro para cualquier aficionado a la fotografía. Las formaciones rocosas gigantes, los colores terracota y la sensación de encontrarte en otro planeta te dejarán sin palabras. Y, claro, tus amigos no podrán resistirse a darle like a esas fotos.

Consejo de fotografía:

  • Visita durante la «hora dorada» (el amanecer o el atardecer) para capturar la mejor luz. Esto hace que las sombras se alarguen y los colores se intensifiquen.

Bodega El Muelle: la parada obligada

Si de rincones pintorescos hablamos, no puede faltar una bodega con especialidad en pisco. ¿Qué mejor combinación que buen trago y fotos memorables? El Muelle es esa parada ideal donde, además de degustar un buen pisco, te encontrarás con patios encantadores, barriles envejecidos y, hablando de inspiración, cada rincón tiene su propia historia. La luz natural que entra por las ventanas hace que cualquier fotografía se vea digna de portada.

No te lo pierdas:

  • Prueba el Pisco Sour y no olvides inmortalizar ese momento.
  • Los barriles y los utensilios antiguos son escenarios perfectos.

Pinturas Rupestres de Toro Muerto

Ok, no soy Indiana Jones, pero el simple hecho de ver estas pinturas rupestres en Toro Muerto te lleva a fascinarte con lo que debe haber sido la vida hace miles de años. Lo más impresionante es que parecen haber resistido el tiempo intocables, mostrándonos animales y figuras humanas talladas en piedra. Este lugar es perfecto si buscas algo que no solo sea fotogénico, sino que también despierte tu curiosidad histórica.

Para capturar la mejor toma:

  • Utiliza lentes de gran angular para abarcar la mayor cantidad de arte rupestre posible.
  • Si puedes, lleva un trípode para captar cada detalle con mejor precisión.

Rio Majes: el agua que enmarca toda la escena

El Río Majes es como ese viejo amigo que siempre está ahí para hacer el momento aún más memorable. Aquí tienes un sinfín de oportunidades para jugar con los reflejos del agua, los rústicos puentes que lo cruzan y, de repente, hasta te encuentras con flamencos descansando en la orilla. No sé tú, pero yo he pasado horas descubriendo nuevos ángulos y detalles. Ah, y si te animas al rafting, tienes garantizado un álbum de fotos para el recuerdo.

Tips para tus fotos acuáticas:

  • Apunta por las mañanas para evitar la luz directa.
  • Las fotos en movimiento (agua corriendo, reflejos) capturan la esencia del lugar.

¿Te sientes más creativo aún?

La creatividad no siempre viene en forma de lienzos y pinceles; a veces es ese paso extra que das para encontrar la foto perfecta.

Y ahí lo tienes. Si alguna vez pensaste que Aplao era solo campos y cerros, espero haberte demostrado que es un caldero de creatividad esperando a ser descubierto. Así que agarra tu cámara, tu mejor actitud y lánzate a buscar esas fotos que van a dejar a todos sin palabras.

¿Qué más quieres saber?

¿Cuál es el mejor momento para visitar estos lugares?

Te puede interesar:  Cuáles son los desafíos económicos más importantes que enfrenta el Perú en la actualidad

Sin duda, temprano por la mañana o al atardecer. La luz natural en esos momentos del día es mágica y hace que cualquier toma se vea mucho más impresionante.

¿Qué equipo de fotografía necesito llevar?

Un buen smartphone puede hacer maravillas, pero si eres de los que prefiere una cámara profesional, un lente gran angular y un trípode serán tus mejores amigos.

¿Es seguro viajar solo a estos lugares?

En general, sí. Pero, como en cualquier viaje, siempre es mejor estar atento a tu entorno y, si puedes, compartir la experiencia con alguien más. ¡Siempre es más divertido!